17/08 1:46:24

El artista y el mendigo tienen cosas en común, una de ellas es el amor por la libertad, la libertad para vivir y sufrir. Pero sabemos que ser libre en este mundo es estar como a la deriva en el océano sobre una hoja. Te alimenta lo que te rodea y alimentas a los que te rodean. Pero la riqueza interior que todos llevamos dentro y que solo algunos logramos descubrir... esa riqueza es el pozo de agua fresca que nunca se termina por mas árido que sea el desierto que se esta cruzando. La libertad deja salir los sentimientos mas profundos bautizados por la esencia divina del alma y cuerpo totalmente libres. Para los artistas y no artistas, a no desanimar.

permalink ||| comentar



agregar nuevo comentario